domingo, 25 de septiembre de 2011

LAS HOJAS SECAS




Entre hojas secas y casi muertas
fui tuya muchas veces,
ahí me besabas locamente
y me confesabas tu amor.

Ahí entre esas hojas secas
te entregue todo mi ser,
mi amor, mis ilusiones,
ahí me hiciste mujer.

Ahí entre esas hojas secas
te entregue todo mi corazón,
te di el amor que tu querías,
y ya vez, todo termino.

Y hoy estas hojas secas
son testigos de gran dolor,
y sienten correr entre ellas,
las lagrimas que lloro yo.

Ellas, que fueron mudas testigos
de tus tórridos besos de pasión,
que supieron de los besos prohibidos
que me hacían temblar de emoción.

Ellas, si, aquí están conmigo
participando en mi gran dolor,
escuchando mis sollozos y gemidos
por causa de tu desamor.