sábado, 3 de septiembre de 2011

Dudaba si…


Dudaba si…
Dudar es humano, y cuando dudamos debemos usar la balanza de nuestro propio entendimiento.
Sentir el peso de la duda mientras ésta se ríe del mundo y de nosotros mismos,  y aguantar con firmeza. Todos caemos, y a la postre sufrimos por ello.
Querer u odiar, subir o bajar, dejar o tomar, salir o entrar, volver o no volver, reír o llorar…
Ante la duda la conciencia a veces sirve de ayuda y si no, busca una mano amiga que dude contigo.

¡Qué bueno es tener un amigo a quien darle la mano…!