jueves, 26 de enero de 2012

La carreta vacia




Caminaba con mi padre cuando él se detuvo en una curva y después de un
pequeño silencio me preguntó:
- ¿Además del cantar de los pájaros, escuchas alguna cosa más?
- Agudicé mis oídos y algunos segundos después le respondí:
- Estoy escuchando el ruido de una carreta.
- Eso es -dijo mi padre-.
Es una carreta vacía.
Pregunté a mi padre:
- ¿Cómo sabes que es una carreta vacía, si aún no la vemos?
Entonces mi padre respondió:
- Es muy fácil saber cuándo una carreta está vacía,... por causa del ruido.
Cuanto más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace.

Me convertí en adulto y hasta hoy cuando veo a una persona hablando
demasiado, interrumpiendo la conversación de todos, siendo inoportuna o
violenta, presumiendo de lo que tiene, sintiéndose prepotente y haciendo de
menos a la gente, tengo la impresión de oír la voz de mi padre diciendo:
''Cuanto más vacía la carreta, mayor es el ruido que hace''
La humildad consiste en callar nuestras virtudes y permitirle a los demás
descubrirlas.
Y recuerden que existen personas tan pobres que lo único que tienen es
dinero.
Y nadie está más vacío que aquel que está lleno de egoísmo, de un supuesto
''Mi Mismo''.

lunes, 23 de enero de 2012

DESGRANANDO SUEÑOS


Se nos fue la vida sin darnos cuenta
desgastándonos con el tiempo
sembrando promesas en el corazón,
desgranando sueños que murieron al final del camino,
amantes de un verano fuimos,
nos apaga el silencio y ese sabor a derrota
que nos nubla los ojos y nos deja vencidos

Sin saberlo la vida nos dejó atrás
minuto a minuto, momento a momento
reviviendo las horas de un pasado
que llamamos con nostalgia,
años que se fueron entre esperas y desencuentros,
hoy nos ocultan las telarañas del ayer
tras el recuerdo añejo del amor

Marchitas de ausencias y añoranzas
las caricias duermen en nuestra piel
evocando cada suspiro que se llevó el adiós,
seguimos todavía desgranando sueños
aunque el manto de la ausencia nos cubra
retoñan nuestros besos en el viejo dolor

Sin demora nos entierra la vida año tras año
en la tumba del fracaso sin flores ni epitafios,
hoy somos hojas mustias de un otoño
que mueren de olvido y de añoranza
arrastradas por el viento y la lluvia
esperando el ocaso y el invierno
en la estación de su último tren

Se nos fue la vida sin poder amarnos
y heridos de amor y soledad
cerramos las puertas del presente,
muriendo con un adiós eterno,
nos vamos alejando como el cielo y el mar
viendo como el sol se pierde
reinará entre nosotros la nada y la oscuridad...

Si los besos de tu boca......


Si los besos de tu boca,

equivocaran su camino,

y en lugar de venir a mis labios,

tuvieran otro destino,

alguna me los habría robado,

dejándome sin tus besos queridos

y con mi corazón destrozado.


Que vacío sentiría mi boca,

si ya no respiraras a mi lado,

no sólo tendría el ama loca,

también la luna se hubiera ocultado.

el cielo luciría negros nubarrones,

testigo del inmenso dolor causado.


Besos tuyos, besos de tu boca,

que son mis besos, los besos míos,

esos que mi deseo provocan,

que a mis labios han estremecido.


Quiero saber tus labios cerrados,

cada vez que de mí ellos estén lejos,

que sólo se abran en tus sueños,

y siendo mi cuerpo tu espejo.


Cuando los besos tienen dueño,

no cambian bocas ni recorrido,

sólo se deshacen en la boca

de aquel amor que has elegido….


Besos tuyos que sellan,

un amor puro y sincero,

demuéstrame al no darlos a otra,

que el amor que sientes,

es un amor verdadero,

y que sólo en mí lo reconozcas....

Al anochecer...


Al anochecer… me di cuenta que lo que más vale se va muy pronto y no regresa, el tiempo.

Al anochecer… se va con el tiempo mi persistente deseo de tenerte.
Al anochecer… quiero regalarme un pequeño espacio discreto y neutro, donde pueda persuadir los pensamientos de mi mente y los deseos de mi cuerpo.
Al anochecer… se mezclan mis fantasías de encontrarte otra vez en mis sueños para amarte sin cordura y desengaños.

Al anochecer… no te encuentro, pero desde la ventana veo el cielo brillando con la luna y te siento.
Al anochecer… aunque tú estés lejos nos cubre el mismo techo.
Al anochecer… quiero volar y esconderme entre las nubes para observarte.
Al anochecer… se funden mis ilusiones con mis pasiones, confundidas con el olvido.
Al anochecer… aun me queda un soplo de vida en mis recuerdos.

Al anochecer… no te busqué y me encontraste, ahora te espero y no vienes a buscarme.

domingo, 22 de enero de 2012

Sueño




Cada día me cuesta más despertar, salir de mis sueños y volver a la realidad, a la tristeza, a la pena, pues para mí ahora son inseparables...

Soñar es la única forma que encuentro de no sufrir, son los únicos momentos en los que no sufro, en los que mis ilusiones y fantasías superan a mis temores y angustias...

Anoche soné contigo, soñé que me buscabas, que me llamabas, que me querías, tal vez solo fue un sueño, podría gritar, besarte pero hoy no estás y no te veo, te extraño y no me río, me rompo y no te olvido, te añoro y quisiera quererte sin descanso...

San Andrés de Teixido


,
Habia oido hablar de este lugar y su leyenda y como es obvio decidí visitarla con mi esposa, de vivos en estas vacaciones.
 El Santuario de San Andrés de Teixido es uno de los lugares más importantes de peregrinación de Galicia. Situado en los acantilados de la Sierra da Capelada, entre Cariño y Cedeira, a 140 metros sobre el nivel del mar, está rodeado de leyendas, habiendo una que dice: Que quien no va de vivo, va de muerto.

Existen muchos caminos para llegar a San Andrés, pero los dos más importantes son estos. El primero discurre por la sierra da Capelada y los acantilados de Vixia Herbeira y el coche llega hasta el pueblo. El segundo parte de Cedeira que los lleva hasta el Santuario, tras una caminata de 12 kilómetros que dicen merece la pena, - pero que nosotros no lo hicimos - según los autoctonos merece la pena por las espectaculares vistas de las Ría Altas que tenemos durante toda la ruta, destacando la del mirador de Os Cadrís. Desde allí, el camino es en continuo descenso hasta la aldea de Teixido y el Santuario del apóstol San Andrés.
Historia
Según la tradición, este apóstol, en su peregrinar por estas tierras, llegó en barco hasta los acantilados de Ortegal, donde volcó su embarcación y se convirtió en una roca, A Barca de San Andrés. En ese momento, Dios le prometió que tendría un santuario y una romería que duraría hasta el fin del mundo, y a la que tendrían que peregrinar todos los cristianos, ‘ o que non vai de vivo, vai de morto’, nadie entraría en el cielo sin haber visitado antes el santuario.
Las primeras noticias documentadas de la existencia del monasterio datan del siglo XII, perteneciente a la orden de San Juan de Malta, dependiente de Portomarín. En el año 1391, aparece en el testamento de una señora de Viveiro, que dice ‘mando ir por mi en romería a Santo Andrés de Teixido, porque se lo tengo prometido, y que le pongan en su altar una vela del tamaño de una mujer de mi estado’.
El dicho de ‘A San Andrés de Teixido, vai de morto que non foi de vivo’ nos indica que las personas que no han ido en vida, deberán peregrinar en alma al santuario. San Andrés se convierte desde la Edad Media en uno de los principales centros de peregrinaje de Galicia, y nuestra visita está llena de tradiciones, que iremos asimilando poco a poco.
El pueblo
Entramos en el pueblo por un pequeño callejón entre las casitas blancas del pueblo, donde las gentes del lugar venden los recuerdos típicos… conchas, imágenes del santo, herba de namorar, recuerdos que iremos conociendo poco a poco en la visita.
Arquitectura
En la parte inferior del pueblo, de frente al mar, se encuentra la iglesia. Comenzada a construir en el siglo XVI, sufrió diferentes reformas en siglos posteriores. De la primera época se conserva la Portada norte, de estilo gótico. Al lado de la fachada, se levanta la torre de base cuadrada de finales del XVIII.
En el interior contemplamos unas pinturas murales que representan el martirio de San Andrés, y el retablo mayor barroco, de mediados del siglo XVIII con el relicario, de estilo barroco italiano, donde se encuentran los restos del apóstol Andrés.
En un lado del templo, nos sorprenden la cantidad de ofrendas que han dejado los peregrinos: cientos de velas y diversas figuras de cera permanecen encendidas en señal de adoración al santo.
Fonte do Santo
Salimos del Santuario y bajamos por una empinada pendiente a la Fonte do Santo. Esta fuente se dice que brota de debajo del altar del santuario. La costumbre es echar una miga de pan en la fuente para consultar si el santo accederá a nuestra petición. Si flota se cumplirán nuestros deseo y si se hunde no se cumplirán.
A Barca de San Andrés
Desde la Fonte do Santo miramos los escarpados acantilados y las islas Gabeiras, una de las cuales cuanta la leyenda que es la barca de San Andrés.
Herba de namorar
Otra tradición que se mantiene es la herba de namorar, hierba que ayudará a buscar la pareja perfecta, y los sanandreses, figuras hechas por los vecinos con miga de pan, endurecida al horno, y pintada con colores brillantes, que reproducen los atributos del santo.
Aquí finalizamos nuestra visita a San Andrés de Teixido, inundados por la tradición de los romeros que, año tras año, visitan este santuario.